En la PNL intervienen tres términos que forman la técnica de programación neurolingüística. Por un lado la “programación” que es el aprendizaje a través de la experiencia. Otro “ neuro” todos estos aprendizajes necesitan de una estructura neuronal para ser almacenados. Por último la “ lingüística” todas estas experiencias y aprendizajes se comunican a través del lenguaje. Por lo tanto el conjunto de técnicas eficaces para mejorar diversos aspectos de nuestra vida desde la comunicación interpersonal e intrapersonal y la autoestima forman la programación neuro lingüística.
Estas técnicas nos sirven para generar estados positivos, gestionar mejor nuestras emociones, saber cómo esas emociones afectan a nuestro cuerpo, y ayuda a tomar mejor conciencia de ellas.
Cuando aplicas la PNL te conoces a ti mismo y puedes conocer a los demás, desarrollando las habilidades necesarias, y pudiendo comunicarte mejor con los demás. Aportando conectar y conocer, cómo comunico, cómo comunican los demás, mejorando las relaciones personales, pues entendiendo el entorno aprendemos a comunicar en forma asertiva.
En nuestra comunicación empleamos 7% palabras, 38% tono de voz y 55% lenguaje corporal, todo junto genera la imagen que crea la palabra y la palabra crea una acción y esa acción un comportamiento que crea una realidad.
Por lo que la PNL nos ayudará a modelar personas que organicen su pensamiento, sentimiento, lenguaje y comportamiento para alcanzar los resultados esperados.
La PNL se basa en aspectos fundamentales como los objetivos a conseguir, esto constituye una guía que orientará todos los recursos disponibles para conseguir esos objetivos.
Otro aspecto es la capacidad de observar los pequeños detalles para ser consciente de lo que ocurre a nuestro alrededor. Los humanos discurrimos entre ver y escuchar nuestro entorno o fijarnos solamente en nuestras propias emociones y pensamientos. Conociendo los objetivos que buscas y utilizando la capacidad de observar los detalle de tu alrededor, obtienes las herramientas que te permiten realizar ajustes en tu comportamiento, si es necesario, para que con tus actos encuentres la dirección que deseas haciendo flexible tu comportamiento, probando algo diferente, si es necesario, para lograr los objetivos, utilizando estos aspectos mejoramos la capacidad de compenetración con otras personas para tener relaciones más eficaces.